Espacio ultraterrestre (delimitación)

El espacio ultraterrestre se refiere a la región o extensión que existe más allá de la Tierra y entre los cuerpos celestes. No existe consenso internacional sobre dónde acaba el espacio aéreo y dónde empieza el espacio ultraterrestre, sobre todo porque estos términos no se han definido adecuadamente en el derecho internacional. Algunos expertos sostienen que el espacio se extiende hasta 100 km sobre el nivel del mar. Esto es así porque en su punto orbital más bajo, o perigeo, algunos satélites han operado a unos 100 km (328.000 pies o 62 millas). Esta altitud aproximada se conoce como la línea de von Kármán, comúnmente referenciada como el punto de demarcación entre el aire y el espacio y el punto en el que se cree que una aeronave tendría que alcanzar la velocidad orbital para producir suficiente sustentación para mantenerse en vuelo. Hay otros, sin embargo, que defienden que la delimitación debería ser menor, estableciendo la altitud de delimitación en 80 km sobre el nivel del mar para tener en cuenta las naves espaciales suborbitales así como los vehículos aeroespaciales híbridos capaces de operar tanto en el espacio aéreo como en el espacio ultraterrestre.

En la actualidad, han surgido dos escuelas principales de pensamiento con el objetivo de responder a la cuestión de la delimitación. Por un lado, el “espacialismo” defiende esencialmente una línea fija, a una altitud determinada, para la división del espacio aéreo y el espacio ultraterrestre. Por otro lado, el “funcionalismo” se centra en la naturaleza del vehículo en cuestión: la ley aplicable dependerá de las funciones que cumpla.

Cabe señalar que algunas definiciones del derecho espacial nacional establecen una delimitación específica a efectos de concesión de licencias.